Si una cosa está clara es que hacerse un tatuaje es una decisión importante, pues es algo que te marca de por vida. En algunos casos, si una persona no está conforme con el tatuaje que se ha realizado, puede taparlo con un nuevo tatuaje que le guste más. En los casos en los que se quiere eliminar completamente el tattoo del cuerpo, suele recurrirse a tratamiento láser. Pero en este caso, esta persona tenía tanta prisa que decidió eliminar su tatuaje con un rallador de queso. ¿Por qué tenía tanta prisa? Te contamos las razones aquí.

La historia, que ocurre en Argentina, no habría sido conocida si un amigo suyo no hubiese compartido en Twitter estas imágenes:

Un amigo se tatuó y como no le gusto el tatuaje se lo saco con un rayador de queso. Si un rayador de queso pic.twitter.com/1tHObPVvaq

— Matías (@_Matycosta) October 1, 2019

A partir de esto, todo el mundo se preguntaba qué se le pasó por la cabeza para hacer semejante cosa. El chico tuvo que conceder una entrevista a los medios, y a través de Infobae comentó: «Les pido, por favor, que no digan mi nombre ni enseñen mi cara. Tengo razones, no quiero que piensen que estoy loco».

¿Por qué alguien iba a recurrir al método tan doloroso de eliminar su tatuaje con un rallador de queso?

El chico compartía los motivos de su decisión: “Me hice el tatuaje y la semana siguiente quería inscribirme en la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA). En los requisitos de la web no mencionan nada, pero me dijeron que no podía tener tatuajes visibles.”

España ahora mismo mantiene vigente la legislación que no permite realizar, por ejemplo, las oposiciones a Guardia Civil con tatuajes visibles, como ya comentamos en un post anterior. En Argentina, en el cuerpo de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) tampoco se permite. Pero ¿justifica eso recurrir a un método tan doloroso?

Añade: “También fue por motivos estéticos. No me gustó el resultado. Busqué en YouTube maneras de borrarlo. Lo intenté con una piedra pómez, pero no tuve resultados. Entonces continué con el rallador. Me dolió y sangré muchísimo. Tenía que vendar y colocar desinfectante y antiséptico todo el rato. A la semana me pusieron la vacuna del Tétanos”.

Las imágenes de Twitter detallan cómo fue el proceso. Incluso, el chico llegó a compartir un video en sus redes sociales, que ya ha sido eliminado. A pesar de haber compartido imágenes en las que no se ve ningún rastro del tatuaje (aunque sí se puede observar la cicatriz y las manchas en la piel), el chico afirma: “No se lo recomiendo a nadie”.

En este caso, tuvo suerte de no haber sufrido ningún tipo de complicación médica, más allá del sangrado y el dolor que él mismo se curó. Evidentemente, eliminar su tatuaje con un rallador de queso es algo que nadie le recomendaría en ningún caso. 

Si quieres eliminar alguno de tus tattoos, lo mejor que puedes hacer es recurrir a personal especializado en ello, y a tratamientos como el láser. Esta opción es la manera más segura y controlada, aunque el coste no está al alcance de todos. Por eso, recomendamos estar muy seguros del diseño, de la zona y de la decisión antes de hacerse un tatuaje.